martes, 16 de abril de 2013

Pan de calabaza

Pan de Calabaza
Esta es una receta norteamericana. No he logrado encontrar el por qué le llaman "pan" cuando en realidad es un "bizcocho", pero bueno, esto es lo de menos. La cuestión es que  es una receta muy fácil de elaborar y el resultado es espectacular. Sólo deciros que, después de probarla - hace un mes que lo hice por primera vez, esta foto corresponde al pan nº8. Después de unos cuantos panes, he "afinado" la receta hasta lograr el resultado que aquí os muestro. Espero que os guste tanto como a mi.


INGREDIENTES

- 250 gr. de calabaza rallada ( podéis llegar hasta los 275 gr., pero no más, porque la miga queda húmeda y no os da el aspecto de cocida, parece que quede cruda aunque no sea verdad.
- 200 gr. de harina
- 1 cucharadita (café) y media de canela en polvo
- 3/4 cucharadita (café) de jengibre en polvo
- 1/2 cucharadita (café) de nuez moscada rayada
- 1 cucharadita (café) de ralladura de piel de limón
- 1 cucharadita y media (café) de levadura química ( tipo Royal)
- 150 gr. de azúcar
- 2 huevos grandes
- 4 cucharadas (soperas) de aceite de girasol
- 1 cucharadita ( café) de sal
- 50 gr. de nueces troceadas


PASOS

1- Calentar el horno a 175º
2- Lavar, secar y rallar la calabaza (rallador ancho, así no sacamos demasiado liquido)
3- Mezclar la harina, canela, jengibre, nuez moscada, levadura, piel de limón y azúcar.
4- En otro bol, mezclamos los huevos, la sal y el aceite.
5- Incorporamos los huevos a la mezcla de la harina y ligamos bien la masa, procurando que no entre demasiado aire.
6- Cogemos la calabaza y la ponemos entre dos papeles de cocina para secarla un poco. No mucho.
7- Incorporamos la calabaza a la masa del bizcocho y mezclamos bien.
8- Por últimos añadimos los trozos de nueces y volvemos a mezclar.
9- Dejamos que la masa repose mientras untamos de aceite o mantequilla el molde y espolvoreamos el mismo con harina.
10- Vertemos en el molde; golpeamos ( con cariño ) el molde para que se asiente bien la masa y eliminamos con cuidado cualquier burbuja que se haya formado al verter.
11- Horneamos arriba y abajo durante 50 minutos, bajando el horno a 150º y vigilando a partir de los 40 minutos. El tiempo de horneado dependerá del horno que tengáis. Yo lo tengo a 150º durante 40 minutos y los últimos 10 minutos con la función de arriba con aire.
12- Dejar enfriar, desmoldar... y a disfrutar!


* VARIACIONES


- Podéis cambiar la calabaza por calabacín.
Pan de Calabacín
- En vez de nueces, añadir piñones.
- Probad a variar las cantidades de las especias, así encontrareis la mezcla que más os guste.


* TRUCOS

- Airear la harina
- Mezclad harina blanca con harina integral
- Cuidado con la levadura. No todas responden igual.
- Si cuando mezcléis la masa con la verdura veis que necesitáis un poco más de liquido, agregad crema de leche a cucharadas soperas. Normalmente 1 o 2 serán suficientes.
- Podéis pulverizar el azúcar con el viejo molinillo de café. Cuanto más fino esté antes se incorporará más y mejor a la masa.

domingo, 7 de abril de 2013

¿ Cómo se cuecen las legumbres ?

distintos tipos de legumbres

Las legumbres son una excelente fuente de energía, hidratos de carbono, proteínas, minerales y fibra. Por este motivo se recomienda consumir más de tres raciones de legumbre por semana aunque desde un punto de vista nutricional lo mejor es alternar entre los distintos tipos de legumbre.
Las legumbres secas y verdes se conservan de forma muy diferente. Las legumbres secas más consumidas en España son la lenteja, judía, garbanzo, guisante seco y altramuz. Las legumbres verdes más utilizadas son las habas tiernas, judías verdes y tirabeques.Una de las características de la cocina mediterránea es el empleo de las legumbres, tradicionalmente como primer plato.A continuación se recogen algunas normas de como tratar las distintas legumbres, según algunos tratados tradicionales de cocina.
* Las legumbres secas, sobre todo sin son viejas o si tienen una piel muy dura, es conviene ponerlas en remojo para reblandecer la piel que les cubre.

* Los garbanzos se ponen en remojo la víspera en agua templada con un puñado de sal y se ponen a cocer en agua hirviendo.

* Las judías blancas y encarnadas, cuando son de buena clase, no es necesario ponerlas en remojo, se ponen a cocer en agua fría y cuando rompen a hervir se les cambia el agua por otra fría.

* Las judías que se ponen en remojo, (por se viejas o duras) deben ponerse con el agua hirviendo.
* Las lentejas se ponen a cocer en agua fría y se rompe el hervor por tres veces añadiéndoles más agua fría.

* El hervor para las legumbres debe ser lento y continuo, añadiendo el agua fría o caliente, según la clase, antes que queden secas para que no pierdan la piel.

* La sal se debe añadir a media cocción.

En resumen y como conclusión diremos que: todas las legumbres, menos los garbanzos, se deben poner a cocer en agua fría, añadiendo, siempre que les haga falta, más agua fría, excepto a los garbanzos.

Los garbanzos se pondrán a cocer con el agua hirviendo, añadiéndoles siempre agua caliente. Unas y otras deben hervir muy despacio para evitar que se deshagan. 

Una vez cocidas, las legumbres pueden durar hasta 5 días en el refrigerador dentro de un recipiente hermético.

* TRUCOS

Pueden congelarse en  el propio líquido de cocción o escurridas, durante unos cuatro meses. En este caso conviene no cocerlas del todo porque la temperatura de congelación tiende a ablandar la legumbre.

* UN POCO DE HISTORIA

Las legumbres tienen diversos orígenes, según la especie: en Mesopotamia, en la América precolombina y en Asia oriental, adecuándose perfectamente a la agricultura mediterránea. Las leguminosas y los cereales fueron las primeras plantas cultivadas por el hombre. Hace unos diez mil años en la zona del Cercano Oriente, existía una asociación entre ciertas semillas como el trigo, cebada, lenteja, y guisante y los asentamientos humanos, que era un indicativo de una recolección preferencial: primer paso hacia el nacimiento de la agricultura. Los restos fósiles de semillas de trigo, cebada, lentejas y guisantes de hace ocho mil años indican que ya se encontraban domesticadas por el hombre, domesticación que alcanza a las habas en el cuarto milenio antes de Cristo. Las leguminosas también aparecen pronto en la agricultura del Nuevo Mundo (4000 antes de Cristo), precediendo en casi mil años al maíz.
Los antiguos egipcios tuvieron en alta estima a las lentejas, cultivándolas extensamente y con mucho cuidado. Fueron también muy apreciadas por los romanos; se dice que en el barco especial en que se transportó un obelisco desde Egipto a Roma, durante el reinado de Calígula, se transportaron 840 toneladas de lentejas. Sin embargo, las habas fueron consideradas por los egipcios como alimento despreciable. Los sacerdotes no las comían, aunque el pueblo llano sí. Tampoco eran estimadas por los griegos y los romanos. La causa tal vez haya que buscarla en que pueden provocar fabismo (ver también latirismo). El guisante (o arveja) era alimento habitual en Roma, aunque tampoco muy apreciado. Fue en el siglo XVII cuando se popularizó su consumo en verde y se convierte, en la corte de Luis XIV, en "una moda y una locura" en palabras de Madame de Maintenon.
La judía, cultivada en toda América desde tiempos remotos, se trajo de América a Europa en el siglo XVI, constituyendo al principio un lujo extraordinario, accesible sólo a la mesa de los ricos.
Desde el cultivo de lentejas y garbanzos en la civilización egipcia y con la incorporación después de las alubias blancas y rojas que llegaron procedentes del Nuevo Mundo, se instauraron en las comidas y guisos mediterráneos en la dieta mediterránea.
Corresponde a la soja el orgullo de ser la primera leguminosa de la que se dejó constancia escrita: en los libros de Shen Nung, que datan del año 2800 antes de Cristo, se describen los cinco cultivos principales y sagrados de China: arroz, soja, trigo, cebada y mijo. Con ella los antiguos elaboraban preparados de alto contenido proteínico (requesón, salsas, quesos, pastas) utilizadas para condimentar y enriquecer su alimentación básica en cereales. Es alrededor del siglo IV antes de Cristo cuando idearon métodos para extraer su aceite.

martes, 2 de abril de 2013

Técnicas de corte : Cebolla

Aprendiendo a cortar la cebolla. Algunos prefieren rayar la cebolla y otros la prefieren cortada /picada. Sea cual sea tu gusto o necesidad, con este vídeo vemos la técnica del corte, aplicable a cualquier fruta o verdura .


Técnicas de corte : Tomate

Tan importante es  el cocinado de un plato como su presentación. Aquí os dejo un vídeo de cómo se pelan los tomates, que es aplicable a cada vez que utilicéis estos frutos y los necesitéis sin piel y de su corte en cuadraditos.


lunes, 1 de abril de 2013

Sardinas en escabeche

Sardinas en escabeche
Este es uno de aquellos platos que una no sabe si comer con las manos o utilizar los cubiertos. La buena educación nos dictaría utilizar los instrumentos  pero la verdad es que saben mejor con los dedos.
Tenemos delante un plato cuyo condimento se pierde en la noche de los tiempos y es por eso que hay tantos escabeches como cocineros que lo hagan. Yo os pondré mi receta ( la de mi abuela, que a la vez era la de su abuela) y desde esta base como salida, podréis hacer todas las variaciones que se os ocurran. Como siempre digo, es cuestión de buscar " tu escabeche".

INGREDIENTES:

- 1 kg. de sardinas frescas, limpias y descamadas. ( Puedes ponerlas enteras o sin cabeza y sin tripas )
- Aceite de oliva para freírlas.( Mejor que queden un pelín crudas o al punto )

PARA EL ESCABECHE:
* las medidas son orientativas, depende de la cantidad de sardinas utilicéis. De todas formas, las proporciones serán siempre las mismas.

- 1 vaso de aceite de oliva virgen
- 1/2 vaso de vinagre
- 1 cabeza de ajos
- 2 o 3 hojas de laurel
- tomillo fresco ( dos o tres ramitas )
- 1 cucharada de postre de pimentón dulce
- sal ( al gusto - podeis prescindir de ella )
- 1 cucharada de postre de pimienta negra en grano

PASOS :

1- Freír las sardinas y dejarlas sobre papel de cocina
2- Sofreír los ajos ( en casa los desgajamos y les pegamos un golpe con la mano de mortero )
3- Una vez hayan cogido color se le añade la mezcla con todos los ingredientes restantes. Dejar hervir durante 5 minutos a fuego medio.
4- Colocar las sardinas en un recipiente y volcar encima la mezcla caliente del escabeche, procurando que queden todas cubiertas.
5- Dejar que se enfríe.

* VARIACIONES :

Podéis utilizar más hierbas aromáticas; en otras recetas de escabeche también ponen orégano y romero.
En la receta  más antigua que he encontrado, el pimentón dulce no aparece, en su lugar utilizaban azafrán. En otras, se utilizan los dos. También se puede añadir una copita de vino blanco.

* TRUCOS:

Como todos los marinados, el resultado es mejor de un día para otro.

* UN POCO DE HISTORIA :

La palabra escabeche según el Diccionario Etimológico de Joan Corominas, proviene del catalán "escabetx", que a su vez deriva del árabo-persa sikbâg, "guiso con vinagre" que en Persia se refería a un guiso de carne con vinagre y otros ingredientes que ya aparece citado en “Las mil y una noches”. Esta técnica culinaria, casi únicamente con carne, se desarrolló paralelamente también en otros países árabes a la vez que en Persia. La pronunciación vulgar de “sikbâg” sonaba a “iskebech”, que pasó a "escabetx" en catalán. Según Corominas, la adaptación directa del arabo-persa al castellano no contendría el sonido "ch" sino que sería algo así como "escabej" o "escabeje".1 También según Corominas, la palabra "escabetx" pasó con el concepto a otras cocinas europeas de lenguas romances. Esta debe diferenciarse del zirbaja, que es una preparación convencional de sabor agridulceEn la andalusí se empleó de igual forma como sinónimo al-mujallal. Además del ingrediente principal a base de una mezcla de vinagre, especias y aceite, el escabeche incorpora frecuentemente color rojizo. Se menciona la preparación de escabeches de carne en diversos tratados andalusies. Como (escabeyg) en el Sent Soví. A principios del siglo XVII, Martínez Montiño da indicaciones muy precisas en su obra de sobre cómo confeccionar escabeches. De la misma forma Alejandro Dumas describe un escabechado de liebre con poco azafrán y más pimentón. A lo largo de la historia culinaria española el pimentón fue substituyendo poco a poco al azafrán.Las obras posteriores de la cocina española van mostrando diversas recetas de elaboración de escabeches tanto de pescado como de carne.

Pan con Tomate ~ Pa amb tomàquet

Pan con Tomate
El pan con tomate ( pa amb tomàquet, en catalán) no es propiamente un plato. Es un "sirve para todo" o un "apañando una comida". Es la base de lo que será un plato completo si le añadimos un acompañante ... o varios.
Hay tantas combinaciones como personas, todo dependerá de tus gustos. El más típico es un buen jamón ibérico (siempre el mejor que te puedas permitir),chorizo, salchichón, longaniza, atún, sardinas, tortilla de patatas ...en fin todo lo que se te ocurra, que tengas por casa, en latas o que sea rápido y fácil de cocinar. Si recibes visitas por sorpresa y les invitas a cenar, no se me ocurre nada mejor que preparar un "Pan con Tomate"; los invitados ya entienden que ese Pan con Tomate vendrá acompañado de algo más, pero eso sólo lo verán en la mesa.
Como todo en la comida, cuanto más alta sea la calidad de los ingredientes, mejor resultados obtendrás. Así que sin más dilación, paso a daros la " eterna receta ":

INGREDIENTES

- Un buen pan. Los mejores son los de tipo Pan de Pueblo (aquí usamos Pan de Payés), con miga prieta y corteza gruesa y crujiente.
- Tomates. Aquí tenemos otro problema. Los mejores son los que aquí llamamos de colgar. Tienen la piel finita y se deshacen al frotarlos con el pan.
- Un buen aceite de oliva virgen o virgen extra
-Sal

PASOS

1- Cortar el pan a rebanadas (ni muy finitas ni muy gruesas - guiaros por la imagen-
2- Cortar el tomate por la mitad y frotarlos contra el pan.
3- Agregar un poco de sal
4- Agregar un chorretón de aceite

Y "et voilà" aquí tenéis el Pan con Tomate.¡ Buscadle buenos acompañantes y os chupareis los dedos !
Ah, se me olvidaba : nunca, nunca, nunca ralléis el tomate y luego " pintéis " el pan con él. A parte de que es un " Sacrilegio" culinario, no obtendréis el sabor que ha de tener el buen Pan con Tomate.

Tomates de colgar
Aquí os pongo la foto de los " tomates de colgar ", porque como en cada sitio, país, etc. pueden cambiar su nombre, así no nos perdemos en el universo tomatero.

* VARIACIONES : Tostar el pan antes de untarlo con el tomate. Si os gusta el ajo, probad a restregar un poco de ajo antes del tomate. También se preparan bocadillos y montaditos.

* TRUCO : Podéis aprovechar el pan del día anterior para preparar el Pan con Tomate. Queda, todavía, más rico.

* UN POCO DE HISTORIA : La mayoría de las fuentes señalan que el origen del hecho de untar tomate sobre el pan, para así ablandarlo, es casi tan antiguo como la llegada de este rico fruto a nuestro país (siglo XVI), aunque la primera referencia escrita no consta hasta el año 1884 y ésta la sitúa en Cataluña donde en las típicas casas de payeses del siglo XIX ya se untaba el pan reseco de días atrás con tomate y un buen chorro de aceite.